ALIMENTACION
La mayor parte del cultivo de cereales a nivel mundial, el cual podría estar destinado para el consumo de personas, es utilizado como alimento para ganado. El 90% de la cosecha global de soja y el 51% del cultivo de cereales terminan en el estómago de los animales. A través del recorrido que pasa por la alimentación animal se pierden grandes cantidades de recursos vegetales, que luego ya no están disponibles para la alimentación humana.
Anbau genetisch veränderter Sojabohnen in Brasilien
Soweit das Auge reicht wird Soja für die Tiermast in Brasilien angebaut.
Masttierhaltung in Deutschland. Diese Schweine aus einem konventionellen Betrieb in der Schwarzwaldregion werden mit Gensoja gefüttert.
Anbau genetisch veränderter Sojabohnen in Brasilien
Galería de fotos y descripción del cultivo de soja genéticamente modificada en Brasil
Para la producción de carne se pierde mucha energía puesto que para producir un kilo de carne se necesitan hasta 12 kilos de soja o cereales y alrededor de 15.000 litros de agua. Si la soja se procesara directamente a otros derivados, como Tofu, soja en pedacitos, o leche de soja, y a esto se le agrega agua, lo que aumentaría la cantidad.El resultado por producto sería aproximadamente entre 12 y 20 kilos. De este resultado se podría llenar el estómago de muchas más personas. A partir de la alimentación vegetal se podrían solucionar nuestros problemas de alimentación globales. Lo que al mismo tiempo significaría que no necesitaríamos tantas áreas de tierra.
De esta forma tendríamos más espacio para humanos, animales y nuestro medio ambiente. Grandes áreas de tierra podrían servir para la regeneración y protección de los bosques. Un estudio actual de la Universidad de Oxford habla de una extensión de tierra del tamaño de Estados Unidos, China, Australia y la Unión Europea juntos, la cual podría estar disponible si la humanidad se alimentase a base de vegetales. No hay otra variante más efectiva y fácil para combatir el calentamiento global, la destrucción de nuestro medio ambiente y el hambre.
La población mundial aumenta rápidamente. En unos pocos años habrá aumentado entonces de siete mil millones a ocho mil millones en el año 2025. Al mismo tiempo crece la demanda por más alimentos. A través de una alimentación a base de vegetales podríamos alimentar sosteniblemente y de forma cuidadosa con nuestros recursos a las generaciones futuras.